¿Estás dándole vueltas a los distintos aspectos que inciden en la elección de las invitaciones de boda? En ese caso aquí intentaremos darte algunas directrices generales que te ayuden a tomar las decisiones correctas y a conseguir finalmente que las invitaciones para tu boda cumplan con todo lo que deseas.
El primer paso para los novios es decidir lo grande o íntima que quieren que sea su boda, estipular el presupuesto y acordar la cantidad de personas que podrán invitar. Deben definir las reglas respecto a los invitados, como por ejemplo, invitar o no a los parientes lejanos o a los amigos de los padres.
Hacer una lista y ajustarla: Cada novio deberá realizar una lista de las personas que les gustaría invitar a la boda. Esta lista servirá para obtener un panorama general respecto a las personas cuya presencia es completamente indispensable y aquellas de las que se puede prescindir en el caso de acortar la lista. Es importante tener bien definidas las prioridades de cada novio y que además estas se coordinen para llegar a acordar la lista definitiva.
Personaliza la lista: Ya sea a mano o en el ordenador, crea una lista personalizada y agrega todas las columnas que necesites, para poder añadir de forma cómoda y ordenada toda la información sobre los invitados, como el nombre, los acompañantes, la relación con otros invitados, si han confirmado o no la asistencia, si tienen alguna alergia o alguna otra circunstancia a tener en cuenta…
Agrupar a los invitados por categorías: En cuanto tengas una lista más o menos definitiva, debes agrupar a los invitados en base a los sitios en los cuales tienes intención de situarlos: si es alguien del trabajo, de la familia, amigos, etcétera. A partir de esas categorías podrás comenzar a organizar la composición y distribución de las mesas. No olvides aclarar con el responsable del banquete el número y tamaño de las mesas, para decidir a cuantas personas asignar a cada una.
Es muy importante tener una única lista actualizada para evitar confusiones y olvidos. Aunque los novios hayan trabajado inicialmente en sus propias listas, es importante ponerla en común cuanto antes y actualizarla conjuntamente. Evita tener distintas versiones en panel, en el ordenador, en el trabajo… o terminarás por no saber cual es la versión más actualizada.